6.15.2010

LA FALTA DE PALABRAS SE CONVIERTE EN UN MURO

Despierto solo otra vez,

Oigo tu voz, oigo tus pasos viniendo hacia mí.

Sin embargo tu silueta no se deja ver,

El calor de tu cuerpo ya se ha ido de aquí

Huelo el perfume de tu piel,

Siento tu presencia de mujer,

Y me retuerzo de angustia al pensar,

Que todo eso ya lo tiene él.

Él, aquel que te compro con claveles una tarde de Abril,

Él, aquel que te escribía poemas que te alejaban de mí;

Él, aquel que te decía que tú ya no eras para mí;

Él, aquel que de repente con el beso de tu boca se encontró,

Con el roce de tus manos se quedó y todo finalmente me lo robó.

Y me dejaste: solo, callado, sin siquiera poder pedirte perdón.

Perdón por no cuidarte cuando te tenia,

Perdón por no darte lo que querías

Perdón por no sabe amarte como me pedías

Perdón por no cumplir con lo que prometía.

Desde entonces todo cambió; yo cambié, vos cambiaste, él cambió.

La vida es una sola y esa sola es la que debemos vivir.

Conforme el tiempo va pasando,

Es la vida la que nos va enseñando.

Nos enseña a mirar atrás, no para regresar, sino para saber hacia donde debemos seguir,

Donde debemos pisar para no volver a sufrir.

A mí me enseñó y yo aprendí.

Aprendí a querer lo que tengo, a cuidarlo y no dejarlo.

Me enseñó la vida que lo difícil no es intentar, mucho menos llegar;

Lo difícil es llegar y mantenerse en el lugar.

Lo difícil no es conseguir,

Lo difícil es valorar y saber retener lo que tanto nos costó lograr.

Y a vos?

A vos también algo te enseñó.

Porque ya no sos feliz,

Ya no se te iluminan los ojos al verlo venir.

Las memorias de un tiempo atrás,

Los recuerdos del verdadero amor,

Las alegrías que ya no tenés y un corazón que de mil modos te amó,

(aquel que destrozaste en la noche que dijiste adiós)

no te dejan ser feliz.

Compraste un boleto sin garantía,

Compraste un boleto que una nueva vida prometía.

Y dejaste que por medio de claveles y bombones,

Y poemas que ni siquiera él escribió,

Te vendiera un proyecto que muy pronto caducó.

Te embarcaste en este viaje cerrando puertas a tus espaldas,

Muy segura de que nuevas y mejores pronto encontraras.

Pero él no te quiere como te quise yo,

Él no te besa con los labios de pasión, a la que tu boca se acostumbró.

El ya no te mira como te miraba yo,

Desnudándote en cada parpadear,

Haciéndote entender el significado del verbo amar.

Y cuando lo besas, cierras tus ojos,

Y en tu mente mi imagen te atormenta nuevamente.

Y cuando lo tocas, un intenso escalofrió recorre tu espalda,

Recordándote la textura de mi piel y el calor que yo noche a noche te daba.

Y te resignaste a vivir así;

mintiéndole

Sabiendo que el te miente a vos también.

Diciéndole que lo esperas,

Cuando es mi imagen la que deseas ver venir.

Por eso quisiste regresar,

“que olvidara todo lo pasado,

Y recomenzáramos lo que nunca debió terminar”me decías.

Pero la puerta que vos misma cerraste,

Aquella que a tus espaldas dejaste, ya no la pudiste encontrar.

Esa puerta desapareció. En su lugar un nuevo muro se levantó.

Un muro que solo el tiempo podrá derribar para darte una nueva oportunidad.

Entonces..Que te enseñó la vida a vos?

también te enseñó a valorar,

A cuidar lo que a tu lado está

Pero otra lección más tuviste que aprender.

Aprendiste que un conjunto de palabras, un conjunto de flores,

Un conjunto de debilidades en manos de quien no las sabe utilizar,

Pueden engañar, pueden lastimar y te pueden hacer equivocar.

E incluso algo más importante la vida te enseñó:

Te enseñó que un reclamo, una llamada de atención apelando al corazón,

(en el tiempo en que todavía se puede hablar)

puede, a dos personas que se aman, entenderse y amarse mucho más,

sin dejar lugar a que las malas experiencias nos quieran enseñar.

Jonny Weisburd

No hay comentarios.: